viernes, 28 de febrero de 2014

No temas - 24 enero.

Es común que sintamos temor ante alguna situación, tribulación o preocupación. Muchísimas veces decimos como Tomás, que si no vemos las llagas y el costado herido, no creemos que Dios está con nosotros. Somos simplemente "Hombres de poca fe" (Jn 20,27) y nadie puede culparnos de eso, no es como si agarráramos un chip, lo cambiamos en nuestra cabeza y listo, tenemos toda la fe del mundo. No es tan sencillo como eso y en realidad, a veces podemos ser bastante incrédulos... Pero, siempre seremos así??

Qué es lo que debemos hacer para lograr que eso eventualmente cambie? Que debemos hacer para aumentar nuestra fe y disipar los temores?

Pues, una de las cosas que en mi opinión, ayuda mucho es la Oración!
Estar en constante comunicación con Dios y estar atentos a sus respuestas.
Nuestro espíritu es débil, y nuestras piernas flaquean por el temor pero, con la oración fortaleces tu espíritu. Y el único momento en que podemos permitirnos doblar nuestras rodillas es ORANDO!!

Que Dios siempre estará ahí? Si, es cierto. Pero demuéstrale a Dios que TÚ también estás ahí, cerca de Él, hablándole, alabándole, adorándole y glorificando siempre su Nombre a través de tu humilde oración.

Algunas personas pueden pensar que orando no se soluciona nada, que estar todo el día recitando palabras al viento no resolverá tus problemas... Y en parte es cierto, porque quien resolverá todo a tu favor ES DIOS!!
El puede hacerlo incluso aunque tú no le digas una sola palabra sobre lo que necesitas pero... La oración existe para que el hombre se dé cuenta que sin Dios no es nada, que sus fuerzas son pocas y que solo es como un barco a la deriva, sin poder hallar su camino a la orilla y arrastrado hacia donde el mar quiere que vaya.
La oración es para que el hombre se humille ante su Dios implorando su ayuda. Para que el hombre recuerde lo pequeño que es ante la inmensidad de su Creador.
Para que los hijos de Dios honren y agradezcan a su Padre por su ayuda y protección!!

No temas hablarle a tu Padre, Creador, a tu Señor, Maestro y Consolador... Siempre estará ahí para escucharte.
No pienses "es que le he pedido mucho", El mismo lo dice en su Palabra 'Pidan y se les dará'.
Si crees que no sabes orar, no temas, porque el orar viene del corazón. Simplemente es hablar con ese que te creó, te dio la vida y un corazón bueno. EL te enseñará a hacerlo, solo debes pedírselo!!
Nuestros padres nos enseñaron a hablar cuando éramos bebes cierto? Pues El hará lo mismo por ti!

"Robustezcan las manos débiles y afirmen las rodillas que se doblan. Díganles a los que están asustados: «Calma, no tengan miedo, porque ya viene su Dios a vengarse, a darles a ellos su merecido; El mismo viene a salvarlos a ustedes.»"

(Isaías 35, 3-4)








Por: Analicia Ramos 
Venezuela 
@aniramos16

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